“Entrar en esta danza del amor”
Primer paso: Contemplamos nuestra vida |
- Hacemos explícito que nos reunimos en Su Nombre. En el Nombre de este Dios Padre-Madre que nos ama incondicionalmente, ... la inspiración del Hijo Crucificado-Resucitado y... el fuego del Espíritu. Amén.
- Como siempre le pedimos a la poesía y a la música, en esta fiesta de la Trinidad, del Dios comunión, que vayan despertando y templando nuestro corazón a traves de esta canción: “El amor puede salvar” de Orozco-Barrientos.
El amor puede salvar
El amor puede salvar, la inocencia de tus ojos.
El incendio en la ciudad, lo que queda en los despojos
El amor puede salvar, el después de las tragedias.
Si te matan libertad, todo lo que te envenena.
El amor puede salvar, una guerra, tanta muerte.
El amor puede salvar, los sueños rotos de la gente.
El amor puede salvar, el brillito que nos queda.
Todo lo que ya no está, y lo que se quedó afuera
El amor puede salvar, a las almitas en pena.
El regreso de un lugar, y el camino que nos queda.
- Te invitamos a repetir alguna frase que te toca más en este momento. Buscamos que ayude a templar el corazón para poder contemplar nuestra vida.
Tiempo personal:
- Nos dice el poeta: “El amor puede salvar...”
- Si dejas que resuene por unos instantes en silencio esta frase: “El amor puede salvar”... ¿Hacia qué expriencias te lleva?
- ...
- ¿Qué experiencias de amor te “han salvado”?
- ...
- ¿Cómo te das cuenta que te han salvado?
- ...
- Si dejas que resuene por unos instantes en silencio esta frase: “El amor puede salvar”... ¿Hacia qué expriencias te lleva?
- Si te parece, lo podes escribir.
- Te proponemos compartirlo. Si estas sol@, lo podes hacer después.
Reflexión:
- Cuando hablamos de “salvar” podemos imaginar a ese valiente bomber@ que le hace frente al fuego para sacarnos del peligro. A veces hemos experienciado que estamos acorralados en medio de “las llamas” de las dificultades, de los conflictos, de las angustias y el coraje de otros, conocidos o desconocidos, nos salva o su fuerza despierta en nosotros el coraje para salir de esa situación. Otras veces hemos sido nosotros los que nos arriesgamos para “salvar” a otros.
- Es verdad que respiramos esta atmósfera del “salvese quien pueda”, sin embargo si nos conectamos mínimamente con nuestras entrañas, empatizamos, nos conmovemos y entonces... salimos al encuentro de las necesidades de los otros, cercanos o lejanos. Otros lo han hecho con nosotros, como recién estuvimos contemplando en nuestra experiencia, eso “nos salva”.
- Nostros sabemos que esta dinámica de “salvación” viene de nuestro Creador. En lo más profundo de nuestro ser, sabemos que todas y todos estamos hechos con el mismo “Barro y Aliento de Dios”. Somos “poder” y “necesidad” al mismo tiempo. Solo tenemos que decidirnos a entrar en esa “dinámica de AMOR”, que es la que nos salva.
- Esto es lo que celebramos en la fiesta de la Trinidad, celebramos “esta dinámica de amor”. Dios es comunión, “una danza de amor” entre el Padre-Madre, Hijo y el Espíritu Santo. Constantemente nos ofrecen entrar en “esta danza de AMAR” junto con toda la creacion. Ese es “el sello” que llevamos en lo profundo de nuestro ser. Todo esta interligado desde el amor, todos nos necesitamos, nos vamos “salvando” unos a otros.
- Como recien cantamos: “El amor puede salvar, la inocencia de tus ojos... el brillito que nos queda”... sí decidimos “entrar en esa dinámica de amor” que Dios nos ofrece en cada amanecer. Para eso será necesario “detenernos”... hacer “silencio”... “escuchar más en profundidad” y “contemplar” lo que vamos viviendo y lo que otros están viviendo.
- Entonces podemos experienciar que el amor no solo nos “saca del peligro” sino sobre todo “expande nuestro corazón”, “expande nuestra capacidad de amar”. El amor nos convoca a arriesgarnos más y a confiar más en la vida, en los demás, en Dios y en nosotros mismos. Una y otra vez hemos sido testigos de que “el amor puede salvar los sueños rotos de la gente”, en pequeños o en grandes gestos. El amor nos da lucidez, creatividad y valentía para volver a empezar, por eso “nos salva”.
- Esta reflexión, ¿Qué me provoca?, ¿Qué me hace sentipensar?
Segundo paso: Escuchamos el Evangelio, La Sabiduría de Jesús |
Según la Comunidad de Juan
“Dios amó tanto al mundo que le dio a su Hijo Único, para que quien cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna. Dios no envió al Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que se salve el mundo gracias a él. Para quien cree en él no hay juicio. En cambio, el que no cree ya se ha condenado, por el hecho de no creer en el Nombre del Hijo único de Dios”.
Nos quedamos un rato en silencio para que siga resonando en nosotros el Evangelio. Si quieren lo pueden volver a leer o volver a escuchar, para seguir contemplando al Maestro.
Reflexión:
- Estos tres versículos que estamos contemplando en esta fiesta de la Trinidad, están dentro del contexto del diálogo de Jesús con Nicodemo. Recordemos que se trata de un maestro de la ley. Se supone que sabe mucho sobre Dios y sus leyes; sin embargo necesita ir al encuentro de Jesús, porque siente que este joven maestro trae novedades. Esas novedades hacen resonancia en “las preguntas” que Nicodemo se viene haciendo sobre su manera de relacionarse con Dios. Hay respuestas que ya no le hacen sentido.
- Jesús después de escucharlo le dice algo que lo desconcertó y al mismo tiempo le abrió nuevas puertas: “Nicodemo tenes que nacer de nuevo, del agua y del Espíritu”. Ese “nacer de nuevo” tiene que ver con esa pregunta fundamental: ¿En qué Dios crees Nicodemo?. Por eso Jesús afirma: “Dios ama al mundo...”. Como si le dijera: “Nicodemo, Dios es Abba, un Padre- Madre que ama al mundo. Dios es amor”.
- Y la segunda afirmación: “Nicodemo, Dios envió a su Hijo al mundo para salvarlo”. La comunidad de Juan nos dice con claridad que Jesús es el Hijo de Dios enviado para “salvarnos”, es decir: para que nos arriesguemos a entrar en esta “dinámica de amar”. Dios no tiene nada que ver con “el dios castigador”, “el dios que pone pruebas”, “el dios que decide el día de nuestra muerte” que en tiempos de Nicodemo y en nuestros tiempos se sigue predicando. Dios envió a Jesús para que nos decidamos a entrar en esta “danza del amor” que “El Padre-Madre, Hijo y Espíritu” viven desde siempre y hoy celebramos en esta fiesta de la Trinidad.
- Algo más. La comunidad de Juan logra expresar de una manera muy hermosa y profunda algo del misterio de Dios cuando dice: “Tanto amo Dios al mundo que envió a su Hijo... para salvar al mundo”. Jesús quisiera que “esa frase” se la podamos decir a cada ser humano: “Dios ama tanto al mundo que envía a este “hijo” y... esta “hija” para salvarlo” , para gestar y parir un mundo más justo, más solidario, más fraterno y sororial, más humano. A cada ser humano, de los 8.000 millones que somos en este momento de la historia, Dios le vuelve a confiar su Sueño, el mismo Sueño que Jesús le puso el cuerpo, porque ama al mundo.
- En cada amanecer Dios nos convoca a “entrar en esta dinámica que es amar”, a participar en esa “danza del Amor”, porque Dios sabe que “solo el amor puede salvar...”; “El amor puede salvar, los sueños rotos de la gente”.
- ¿Qué nos parece esta reflexión?. Y... ¿Cómo la vinculamos con lo que veníamos reflexionando?
Tercer paso: “Dejarnos abrazar por Dios que es AMAR”. |
- Bendecimos los alimentos con las palabras que les broten del corazón. Con la conciencia de que Jesus esta en medio de nosotros. (Capaz que ya lo hicieron).
- El ejercicio simple y profundo de bendedir, de “decir bien” nos ayuda a sabernos arte y parte de La Creación y en comuníón con El Creador, que sigue creando con nosotros. Nos ayuda a cultivar un corazón agradecido.
- Con todo lo que venimos descubriendo y reflexionando, volvamos a escuchar la canción: “El amor puede salvar”. Se la cantamos a la Trinidad, nos sumamos a esta “danza del amor”.
- Ahora los invitamos a hacer una oración aun más explícita. Traemos al corazón diferentes situaciones que estan resonando en nosotros, lo que esta pasando en nuestro lugar, nuestro país, en la humanidad, con nuestra madre tierra…
- Despues de un rato de silencio.
- Dejamos que brote una oración de acción de gracias… de petición… de perdón…
- Tambien, como nos pasa siempre… empezamos a traer la vida de los que estan frágiles, los que estan enferm@s… aquell@s que han fallecido, que han vivido su pascua. Confiamos que estan resucitad@s. Junto con ell@s decimos: “Padrenuestro...”
- Los invitamos a terminar con esta hermosa oración de Francisco en su carta Laudato Si. Es una oración para ir saboreándola lentamente y así darnos cuenta qué significa “entrar en esta dinámica de amar”, en esta “danza del amor que es la Trinidad”.
ORACIÓN CRISTIANA CON LA CREACIÓN
Te alabamos, Padre, con todas tus criaturas,
que salieron de tu mano amorosa.
Son tuyas y están llenas de tu presencia y de tu ternura.
Alabado seas.
Hijo de Dios, Jesús, por ti fueron creadas todas las cosas.
Te formaste en el seno materno de María, te hiciste parte de esta tierra,
y miraste este mundo con ojos humanos.
Hoy estás vivo en cada criatura con tu gloria de resucitado.
Alabado seas.
Espíritu Santo, que con tu luz orientas este mundo hacia el amor del Padre
y acompañas el gemido de la creación,
tú vives también en nuestros corazones para impulsarnos al bien.
Alabado seas.
Señor Uno y Trino, comunidad preciosa de amor infinito,
enséñanos a contemplarte en la belleza del universo,
donde todo nos habla de ti.
Despierta nuestra alabanza y nuestra gratitud por cada ser que has creado.
Danos la gracia de sentirnos íntimamente unidos con todo lo que existe.
Dios de amor, muéstranos nuestro lugar en este mundo
como instrumentos de tu cariño por todos los seres de esta tierra,
porque ninguno de ellos está olvidado ante ti.
Ilumina a los dueños del poder y del dinero
para que se guarden del pecado de la indiferencia,
amen el bien común, promuevan a los débiles,
y cuiden este mundo que habitamos.
Los pobres y la tierra están clamando: Señor, tómanos a nosotros
con tu amor y tu luz, para proteger toda vida,
para preparar un futuro mejor, para que venga tu Reino
de justicia, de paz, de amor y de hermosura.
Alabado seas.
Amén.
Que el Espíritu nos de coraje para ponerle el cuerpo a esta oración.
Estamos contentos de poder ofrecerles esta celebración.
L@s abrazamos Federico cp y Carlos cp
Nos ayudan para armar estas celebraciones … |
- Nos ayuda mucho escuchar “UN TAL JESÚS”. Los invitamos a escuchar Nº 56 “El gemido del viento”.
2. JOSÉ ANTONIO PAGOLA
Si ponen en google “Comentarios bíblicos de José Antonio Pagola” se van a encontrar con sus reflexiones sobre los textos del domingo. Para cada domingo tiene varias homilías porque son de diferentes años.