“Vuele bajo...”
Primer paso: Contemplamos nuestra vida |
- Hacemos explícito que nos reunimos en Su Nombre alrededor de esta mesa.
En el Nombre de nuestro Dios Padre-Madre, de Jesús el Hijo y del viento siempre nuevo del Espíritu Santo. Amén.
- Como siempre nos dejamos sorprender por la poesía y la música que nos ayudan a templar el corazón para poder contemplar nuestra vida y la de Jesús. Esta vez con la canción “vuele bajo” de Facundo Cabral.
VUELE BAJO.
Facundo Cabral
No crezca mi niño, no crezca jamás. Los grandes al mundo le hacen mucho mal
El hombre ambiciona cada día más. Y pierde el camino por querer volar
Vuele bajo, porque abajo: Está la verdad. Esto es algo que los hombres.
No aprenden jamás
Por correr el hombre, no puede pensar. Que ni él mismo sabe para dónde va
Siga siendo niño y en paz dormirá. Sin guerras ni máquinas de calcular
Vuele bajo, porque abajo: Está la verdad. Esto es algo que los hombres.
No aprenden jamás
Por algo parecido a esto, los Taraumaras. De las sierras Taraumaras de Méjico dicen:
Nosotros no usamos armas, porque si las armas fuesen necesarias habríamos nacido con ellas.
Dios quiera que el hombre pudiera volver. A ser niño un día para comprender
Que está equivocado, si piensa encontrar. Con una chequera la felicidad.
Vuele bajo, porque abajo: Está la verdad. Esto es algo que los hombres
No aprenden jamás. (bis)
Bienaventurados los pobres en espíritu. Porque de ellos será el Reino de los cielos.
Y que si se me permite, incluye a la tierra. Aunque los hombres... no aprenden jamás.
Tiempo personal:
- ¿Qué despierta en mi esta canción?; ¿A qué me convoca?
- ...
- El poeta nos dice: “El hombre ambiciona cada día más. Y pierde el camino por querer volar”. ¿Cómo vivís y cómo viven aquellos que conoces, esto de la ambición, que queremos cada día más?
- ...
- Si te parece, lo podes escribir.
- Te proponemos compartirlo. Si estas sol@, lo podes hacer después.
Reflexión:
- En el ser humano habita una fuerza que lo convoca a crecer. Dios sigue creando, a cada niñ@ que nace le regala Su Aliento divino. Como nos dice el génesis: “Somos barro y Aliento de Dios”. Esa potencia nos habita para sumarnos a este sueño de Dios: “sean fecundos y multipliquen la vida”.
- Dios nos convoca a ser humanos, co-creadores con él y ese “poder” se desborda constantemente, la ambición nos enseguece, por eso Facundo Cabral nos recuerda: “Por correr el hombre, no puede pensar. Que ni él mismo sabe para dónde va. Siga siendo niño y en paz dormirá. Sin guerras ni máquinas de calcular: Vuele bajo, porque abajo: Está la verdad. Esto es algo que los hombres. No aprenden jamás”
- El sábado 12 de octubre, una vez más hacemos memoria del en-cubrimiento de América, porque no descubrieron nada. La ambición, la locura por el oro, movidos por el dios dinero, los llevo al genocidio de muchos pueblos indígenas. Nosotros como Iglesia fuimos cómplices.
· Francisco pidió perdón en 2015 en Bolivia: “Les digo, con pesar: Se han cometido muchos y graves pecados contra los pueblos originarios de América en nombre de Dios por causa de la ambición: Pido humildemente perdón, no sólo por las ofensas de la propia Iglesia, sino por los crímenes contra los pueblos originarios durante la llamada conquista de América. Y junto a este pedido de perdón, para ser justos, también quiero que recordemos a millares de sacerdotes, obispos, que se opusieron fuertemente a la lógica de la espada con la fuerza de la cruz.” .
- Es importante pedir perdón, reconocer nuestra culpa y también reparar el daño causado. Una forma de encausar ese “poder” que nos habita y así sumarnos a la causa indígena. Por eso Francisco en la 6ª reunión mundial del foro de los pueblos indígenas, en febrero del 2023 dice: “Deberíamos escuchar más a los pueblos indígenas y aprender de su forma de vida para comprender adecuadamente que no podemos continuar devorando codiciosamente los recursos naturales, porque la tierra se nos ha confiado para que pueda ser para nosotros madre, la madre tierra, capaz de dar lo necesario a cada uno para vivir. Por tanto, la contribución de los pueblos indígenas es fundamental en la lucha contra el cambio climático. Y esto está comprobado científicamente”.
- Sigue Francisco: “Hoy más que nunca son muchos los que reclaman un proceso de reconversión de las estructuras de poder consolidadas que rigen en la sociedad, en la cultura occidental y, al mismo tiempo, transforman las relaciones históricas marcadas por el colonialismo, la exclusión y la discriminación, dando lugar a un diálogo renovado sobre la forma en la que estamos construyendo nuestro futuro en el planeta, junto con nuestros pueblos indígenas”.
- Francisco puede cantar junto con Facundo Cabral: “Dios quiera que el hombre pudiera volver a ser niño un día para comprender. Que está equivocado, si piensa encontrar con una chequera la felicidad. Vuele bajo, porque abajo: Está la verdad. Esto es algo que los hombres. No aprenden jamás”.
¿Qué me provoca esta reflexión?, ¿Qué me hace sentipensar?
Segundo paso: Escuchamos el Evangelio, La Sabiduría de Jesús |
Según la Comunidad de Marcos 10, 17-30
Jesús estaba a punto de partir, cuando un hombre corrió a su encuentro, se arrodilló delante de él y le preguntó: «Maestro bueno, ¿qué tengo que hacer para conseguir la vida eterna?» Jesús le dijo: «¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino sólo Dios. Ya conoces los mandamientos: No mates, no cometas adulterio, no robes, no digas cosas falsas de tu hermano, no seas injusto, honra a tu padre y a tu madre.» El hombre le contestó: «Maestro, todo eso lo he practicado desde muy joven.» Jesús lo miró con amor y le dijo: «Sólo te falta una cosa: vete, vende todo lo que tienes y reparte el dinero entre los pobres, y tendrás un tesoro en el Cielo. Después, ven y sígueme.» Al oír esto se desanimó totalmente, pues era un hombre muy rico, y se fue triste. Entonces Jesús paseó su mirada sobre sus discípulos y les dijo: «¡Qué difícilmente entrarán en el Reino de Dios los que tienen riquezas!» Los discípulos se sorprendieron al oír estas palabras, pero Jesús insistió: «Hijos, ¡qué difícil es entrar en el Reino de Dios! Es más fácil para un camello pasar por el ojo de una aguja que para un rico entrar en el Reino de Dios.» Ellos se asombraron todavía más y comentaban: «Entonces, ¿quién podrá salvarse?» Jesús los miró fijamente y les dijo: «Para los hombres es imposible, pero no para Dios, porque para Dios todo es posible.» Entonces Pedro le dijo: «Nosotros lo hemos dejado todo para seguirte.» Y Jesús contestó: «En verdad les digo: Ninguno que haya dejado casa, hermanos, hermanas, madre, padre, hijos o campos por mi causa y por el Evangelio quedará sin recompensa. Pues, aun con persecuciones, recibirá cien veces más en la presente vida en casas, hermanos, hermanas, hijos y campos, y en el mundo venidero la vida eterna.
Nos quedamos un rato en silencio para que siga resonando en nosotros el Evangelio.
Reflexión:
- La comunidad de Marcos, camino a Jerusalén, nos sigue ayudando a caer en la cuenta lo que es fundamental para Jesús y para todos aquellos que decidan seguirlo. Ese “poder” que nos habita, que recién reflexionamos, es tentado constantemente por el dios dinero, como Jesús lo llama, “el dios Mammon”. Carlos Bravo Gallardo en Galilea año 30 nos dice: ‹‹La riqueza es un serio peligro, porque impide la relación correcta con el Padre y con los hermanos››. Nuestras inseguridades, nuestros miedos buscan una y otra vez seguridad en las propiedades, en el dinero y en otras cuestiones y la ambición nos ciega la mirada.
- Carlos Bravo narra esta primera parte del pasaje de esta manera: “Jesús daba por supuesto que los mandamientos que se refieren a Dios eran fundamentales; pero ya había tenido la experiencia de la capacidad de perversión que tenemos los hombres; el gran conflicto que tuvo con los fariseos lo llevaba a poner el énfasis en el amor a los demás, para que comprendiéramos, en primer lugar, que Dios no quiere de nosotros nada para sí mismo, ni que cuidemos de El o de sus intereses. -¡El se cuida solo!-, sino que quiere que, si lo amamos, amemos a quienes ha dado la vida; y, en segundo lugar, que lo que a él como Padre lo hiere y ofende son las relaciones injustas con sus hijos, el desprecio a la vida y a los derechos de los pobres, los pequeños, los desprotegidos; porque en la vida de los pobres es donde está en juego la verdad de su nombre de Padre en la historia. La gloria de Dios es que el hombre viva y, sobre todo el pobre, que es quien tiene la vida amenazada. Por eso no perdía ocasión para dar relevancia a las obligaciones para con los demás”.
- Contemplando la reacción de los discípulos, Carlos dice: “Ahora los sorprendidos fueron los discípulos. Todo el mundo pensaba que las riquezas no sólo eran una bendición, sino que eran una señal de predilección de Dios, que a los buenos daba bienes aquí en la tierra, y a los malos, en cambio, males. Por eso los pobres, los enfermos, las estériles, los huérfanos, las viudas eran menospreciados. Y ahora Jesús volvía a poner las cosas de cabeza, diciendo que si a alguien le iba a costar entrar al Reino de Dios era precisamente a los ricos”.
- Sigue Carlos Bravo: “Con esto Jesús llegaba al fondo del asunto. Dios no es un gran mago que anda haciendo cosas sorprendentes, como pasar camellos -así se llamaba a unas sogas gruesas, que servían para amarrar las barcas- por los ojos de las agujas, o como meter ricos al Reino; pero hay algo que si puede hacer, y que para los hombres es imposible: hacer que un rico se haga austero, solidario y así pueda entrar al Reino de Dios como a su propia casa, sin sentirse mal en ella, como herencia dada por el Padre”.
- Como decíamos el domingo pasado se trata de usar “la brújula de Jesús”: Tod@s, sea el lugar social donde tengamos “los pies”, estamos convocados por Jesús a colocar “el corazón” en los pobres, sentir la vida desde los excluidos y desde ahí colocar “los ojos” en el horizonte del Sueño-Reino de Dios. Esa brújula despertará en nosotros la empatía, la compasión, la solidaridad, la creatividad y el compromiso por un mundo más fraterno y justo.
- Cantaremos junto con Jesús: “Vuele bajo, porque abajo: Está la verdad”.
- ¿Qué te parece esta manera de contemplar el Evangelio?. ¿Sentís que Jesús te está ofreciendo una clave para mirar tu vida?.
Tercer paso: “Dejarnos abrazar por Dios que es AMAR” |
- Sigamos cultivando nuestra Fe en Jesús, porque confiamos que DIOS SIEMPRE ESTA PRESENTE, como el aire que respiramos. Su amor constantemente NOS ESTA INSPIRANDO para que entremos en esta dinámica que es amar y dejarnos amar.
- Con todo lo que venimos descubriendo y reflexionando, volvamos a escuchar “vuele bajo ” que cantamos al comienzo.
- Si necesitamos, comentemos lo que nos despierta ahora la cancion a partir de todo lo que venimos rezando.
- Ahora los invitamos a hacer una oración aun más explícita. Traemos al corazón diferentes situaciones que estan resonando en nosotros, lo que esta pasando en nuestra familia, nuestra comunidad, nuestro lugar, nuestro país, en la humanidad, con nuestra madre tierra. En comunión con nuestros pueblos indígenas.
- Despues de un rato de silencio.
- Dejamos que brote una oración de acción de gracias… de petición… de perdón…
- Tambien, como nos pasa siempre… empezamos a traer la vida de los que estan frágiles, los que estan enferm@s… aquell@s que han fallecido, que han vivido su pascua, su segundo parto.
- Junto con Jesús decimos: “Padre-Madre nuestro...”
- § Te invitamos a cerrar esta celebración con la oración de Francisco por el Sínodo de la Sinodalidad. Como les decíamos al comienzo, en la iglesia estamos viviendo este acontecimiento. Estamos tratando de nacer de nuevo, con “la brújula” de Jesús. En esta oración de Francisco podemos vislumbrar cuál es el desafío. La rezaremos durante todo este mes de octubre. Esta segunda sesión del sínodo es del 4 al 27 de octubre de este año. La primera sesión fue en octubre del año pasado.
ORACION POR EL SINODO DE LA SINODALIDAD
Ven, Espíritu Santo.
Tú que suscitas lenguas nuevas
y pones en los labios palabras de vida,
líbranos de convertirnos en una Iglesia de museo,
hermosa pero muda, con mucho pasado y poco futuro.
Ven en medio nuestro,
para que en la experiencia sinodal
no nos dejemos abrumar por el desencanto,
no diluyamos la profecía,
no terminemos por reducirlo todo
a discusiones estériles.
Ven, Espíritu de amor,
dispón nuestros corazones a la escucha.
Ven, Espíritu de santidad,
renueva al santo Pueblo de Dios.
Ven, Espíritu creador,
renueva la faz de la tierra.
Amen
- Que el Espíritu nos de coraje para ponerle el cuerpo a esta oración.
Estamos contentos de poder ofrecerles esta celebración.
L@s abrazamos Federico cp, Gilberto cp y Carlos cp
Les proponemos para seguir profundizando... |
-Los invitamos a escuchar en un tal Jesús Nº92 “Por el ojo de una aguja”.
- https://youtu.be/7rqnqTdrPKM?si=B3wZcD3tP_ON3EII
-Les recomendamos la lectura del libro de Carlos Bravo Gallardo sj: “Galilea año 30”. Si quieren les mandamos el pdf del libro.
-Les recomendamos como siempre buscar los comentarios de José A. Pagola y otros.